Debido a la caída prevista para este año en la recaudación tributaria y la necesidad de incrementar los gastos para atender la pandemia por el COVID-19, el próximo año el Gobierno planea emitir bonos hasta por 40 mil millones de soles, cerca de cuatro veces más que lo previsto para el 2020.
El monto para la emisión de bonos toma en cuenta un tipo de cambio de S/3.46 estimado para el próximo año, según lo indicado en el proyecto de Ley Endeudamiento Público del 2021, enviado al Congreso de la República.
ALTERNATIVA. Para Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research, la emisión de bonos era la única forma que le quedaba al Gobierno, además de utilizar más ahorros, para financiar el déficit fiscal que se tendrá para atender la emergencia sanitaria.
“Lo positivo es que los mercados ven a Perú desde una perspectiva positiva. Todavía el país mantiene solidez de fundamentos macroeconómicos, a pesar del deterioro que ha generado la pandemia”, afirmó.
VENTAJAS. Perea confió en que el Gobierno peruano conseguirá buenas tasas de interés, siempre que se mantenga esa perspectiva de solidez.
“Hay que dar señales claras de que el Perú sigue manteniendo la solidez de la economía y que las iniciativas que se dan son responsables y buscan mantener esta solidez”, comentó. Además, recordó que en los meses de abril y mayo se emitieron bonos con un buen resultado entre los inversionistas, lo que hace pensar que todavía se mantiene el apetito por los papeles del Gobierno.
“La demanda por bonos superó en 8 veces lo que el Gobierno finalmente colocó. Hay todavía apetito y si se mantiene las condiciones de la economía peruana, seguramente vamos a conseguir condiciones de financiamiento adecuadas”, explicó.